por los pasteles rojos y verdes
de plastilina
por los nombres pensados
iguales en su reto
por los globos de agua
y los cepillos como lanzas
por la curiosidad de los decimales
por tu número doble
y favorito
—el noventa y nueve—
gracias
por rescatar
en el aire el asombro
la cercanía
por esa luz de origen en patines
por ese mundo
de titánicas pompas
y su alboroto de baquetas.
[a Cristina]
foto: lara zankoul