No hacemos huelga porque no
tenemos jefe ni patrón, ni siquiera un sueldo. Hacemos “con versando” por
absoluta pasión y la pasión no entiende de huelgas. Quizá en ese sentido vamos
un paso por delante, personalmente creo que no necesitamos una reforma laboral,
sino una reforma integral y cuestionarnos más. Infinitamente más.
Charlar con Alejandro Céspedes en estos momentos de su trayectoria vital supone
justamente eso, cuestionarse y sumergirse de su mano en la ontología de la propia existencia.
Pasamos una tarde estupenda y
hablamos mucho. Irremediablemente, y a pesar de mi insistencia por volver sobre
algún poemario anterior, “Topología de una página en blanco” nos ocupó de
pleno.
Él es tan fascinante como encantador
y por alguna extraña asociación de ideas, mientras charlábamos, a mí me venían a
la mente unos versos de Neruda, concretamente de un poema de Residencia en la tierra que se titula “El desenterrado”: “y maderas
nocturnas le rodean,/ y en él aún duermen palomas entreabiertas/ con ojos de
cemento subterráneo”.
No está todo. Nunca está si acaso
existe:
Os dejo el enlace de su página
donde podéis descargar sus libros:
Alejandro, decirte gracias
seguramente sea escaso, tú lo sabes, pero gracias, muchísimas gracias.
[en la foto: Eco (¿no es preciosa?)]