martes, 11 de abril de 2017

(cuando hablo de ti)





no sirve
seguir llorando
he de afrontar
que duermes entre lápidas
que has dejado
un rastro de ternura
en tu pausa de tierra
que has sembrado amor
sin represalias
y cuando hablo de ti
porque te nombro
en las sílabas
y en las hojas
viento por viento
rama por rama
como carne de tu carne
uncida a tu trazo
y a tu huella
hijo de Nicolasa y Fermín
—aunque en realidad eras nieto
y huérfano y solo—
superviviente
soñador
equilibrista
cuando hablo de ti
papá
tu origen
me perfecciona.

foto: mi padre de pequeño

3 comentarios:

antonio molina medina dijo...

Algo te penetra en algo mas que el alma y se hace dolor y sientes lo profundo de unas letras que acongojan y cantan.
Un saludo

María Socorro Luis dijo...


Bravo, Paloma.

...siento un suavísimo aleteo.

Cariños

Licaón dijo...

Tu poema es precioso Paloma, tan desnudo y sincero. Leerlo me conecta con mis propias raíces.

Un saludo

Buscar este blog