Puedo sentir tu miedo en las motas de polvo.
Escucho tu dolor
—el de antes y el de ahora—
lo sé, porque he acariciado tu orfandad
y conozco el abismo de un crujido,
lo sé,
por la misericordia de la lluvia
y por lo inmemorial de tu verdad adherida a los pájaros,
y lo sé porque tú eras, cruzando la avenida,
la luz y el alambique,
puedo sentir tu miedo, no lo dudes,
tan dentro como un sauce su memoria.
[foto: nick bartoletti]
Fabuloso; el poema, y que aún queden almas capaces de sentir tales cosas en este mundo de insensibles. ¿Significa esto que aún hay esperanzas?
ResponderEliminarBesos.
"el abismo de un crujido" cómo puedes contener tanto usando cinco palabras, otros escribirán un tratado de quinientas páginas o lanzarán una oda interminable pero tú vienes y nos dejas con los pantalones de cuadros tatuados al asombro.
ResponderEliminarbesicos una barbaridad .... bueno mejor dos ;)
Hay que ser muy, muy buen ser humano y tener la mirada de los grandes poetas para ser capaz de sentir el miedo del otro en las motas de polvo...
ResponderEliminarGrande en su brevedad.
Sentir el miedo, escuchar el dolor de los otros, como el propio, ahí está el verdadero amor humano, que tanto nos falta.
ResponderEliminarMilbesosyaplausos, linda.
me ha gustado mucho la imagen del sauce.
ResponderEliminarSimplemente hermoso ¡
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Hay una cualidad, a la hora de escribir Poesía, que yo valoro muchísimo, y que tú tienes en tus formas, Paloma, es algo tan simple y tan complejo como hacer que un determinado Poema empiece y termine en sí mismo, más allá del vuelo imaginativo que pueda conllevar; una unidad Poética dentro de esos uni-versos que cada autor expande ante sus ojos. Felicidades por eso también. Un besazo.
ResponderEliminarPaloma:
ResponderEliminarLlego a tu blog de la mano generosa de Julio.
Me felicito por el hallazgo.
Este poema del sentir profundo entre 'las motas de polvo y la memmoria del sauce' me conmueve.
Un saludo afectuoso:
Elsa.
estoy de acuerdo con charcos. "Y conozco el abismo de un crujido es un gran verso", como todo el cuerpo del poema. Besos
ResponderEliminarTengo poco que añadir, Paloma, una sola palabra: Fantástico!!!
ResponderEliminarEs increíble como logras derrumbar las barreras e instalarte con tus versos.
Un abrazo enorme y mil besos.
Leo
Me derretiste. Alcanzada en el mismo centro del corazón. ¡Precioso!
ResponderEliminarBesazo.
La misera de la lluvia...
ResponderEliminarMe recuerda a aquel verso de Neus Aguado, en el que hablaba de esa "lluvia tibia que me lava por dentro"...Mis respetos, Paloma, mis respetos...
Después de todo lo que te han comentado ya, poco me queda por decir que no te hayan dicho, solo que la belleza de tus poemas es comparable con la belleza de tus ojos, recibe un gran abrazo amiga Paloma
ResponderEliminarSi es que... no puedes escribir mejó.
ResponderEliminarAbrazo con dos besos.
Es difícil no repetirse cuando se llega tarde. Pero es que,tía, lo bordas.
ResponderEliminarUn besazo
Y, como no hay dos sin tres, querida Paloma, me subo entre Jesús y Ana y te digo que me parece un poema de quitarse el sombrero, las zapatillas y todo lo que haga falta.
ResponderEliminarMagnifico. Un beso.
Hay miedos que paralizan y no dejan que crucemos la avenida... Quizás un poema como este se convierta en el empujoncito necesario :)
ResponderEliminarDecididamente bello, Paloma, tanto como siempre.
Un beso grande.
PASEO POR TU CASA, LEO, Y TE ENVIO... BESO POETA.
ResponderEliminarAndres
Abrevar de nuevo en tu forma, en tu verbo; en la elevada magnitud de tu llanto, que, sin embargo, nos moja, descendiendo, como rocío en las mejillas. ¿Exquisita he dicho antes? Tal vez. Y lo repito. Un fuerte, fuerte abrazo, Paloma. Gracias por ser como eres.
ResponderEliminarPaloma, aunque de vacaciones, no he podido resistirme a darte las gracias por tus palabras en La emoción. No sabes cuanto me anima que te haya gustado el último poema.
ResponderEliminarHe disfrutado de tu Back up, consigues una mirada capaz de horadar hasta la atmósfera, como si estuviera compuesta por las simas que crean tus ojos. Me ha parecido de una intensidad sobrecogedora pues también anuncia atravesar el tiempo.
"...y conozco el abismo de un crujido,...". Invencible y precioso, poeta.
Un beso enorme.
una maravilla... la pena cómplice en el aire, ese tipo de cosas. precioso.
ResponderEliminarun beso.
Paloma, sos una maestra. Cuan pequeño me sentí al leer este poema tan pulido y refinado!
ResponderEliminarY cuánto sentimiento, no?
Veo tu programa desde Argentina.
Besos
Cuando es posible comenzar un libro, como un blog, por cualquier parte y no desmerece ninguno de sus poemas. Cuando los versos saben a ti aunque sólo se les intuya. Cuando la esencia de los seres o de las cosas adquiere vida fuera de ellas y se hace reconocible gracias al ejercito de palabras que pugnan por su verdad sin cortapisas... Entonces, y en otras muchas ocasiones, es cuando eres necesaria, amiga, y contigo el eco de los acordeones que invitan a bailar sobre la pista al ritmo que marcas. Un abrazo.
ResponderEliminarPrivilegiado done que tienes: el sentir lo que sienten los demás y el plasmarlo en maravillosas letras. Todo un lujazo.
ResponderEliminarSaludos
Que difícil resulta sentir el miedo de los otros, de esos que nos miran con desconsuelo y a los que no alcanzamos.
ResponderEliminarSolo las personas de corazón inmenso llegan a esos miedos ajenos.
Tú eres una de esas personas enormes y además sabes contarlo de este modo.
Un abrazo