soy yo
con la voz secuestrada
y huyendo
soy yo
la que contempla
la nada indecible
de las esquinas
y aguarda
una tristeza más
para reconciliarse
con los muertos
como hacen las estatuas
yo la que mira
yo el recipiente
yo la que estéril nombra
lo desaparecido.
foto: selfie
"...Soy yo, el de la voz secuestrada..."
ResponderEliminarUn abrazo y feliz semana.
Para mí es impresionante leerte una y otra vez y seguir comprobando cómo tus palabras hacen resonar unas cuerdas propias muy íntimas...
ResponderEliminarQueda alojado en mí...
ResponderEliminarBeso, Paloma.
ResponderEliminarTú, la que remueve, la que traspasa, la que da de lleno. La que transforma.
Abracísimo, Paloma. Siempre.
ResponderEliminarno sé qué dices pero todo lo comprendo, a mi manera, desde luego, escribo silencio.
gracias, Paloma, gracias, muchas.
abrazo
m.
Al menos tú sospechas que eres tú...
ResponderEliminarAbrazos, siempre
*hay una leve sospecha
ResponderEliminary una boca sin nombre
sin sombra
*hay un torrente
sin cuerpo
una lalabra tú a tú.
¡es lo que hay, Paloma!
abrazo
Otro yo menos voluble...o más... o no sé...
ResponderEliminarBellísimo poema, Paloma, de los que se quedan dentro.
ResponderEliminarHoy he vuelto a ver nuestra entrevista. Y me he vuelto a emocionar. Eres estupenda. Te quiero.
Un beso.
Estupenda ese yo que lo transforma todo.
ResponderEliminarUn abrazo
Es desolador ser casi siempre "nosotros" y no querer pasar desapercibidos...
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