Foto: Noelia Palafox
Vestida de domingo
de pronto me recuerdo vegetal,
soy en el claroscuro
de un silencio de flores,
vestida de domingo me miro en tu mirada
(por qué dices que es marzo
si llegas en octubre
como una niebla blanca),
mírame,
me he puesto las enaguas
y he ocultado el llanto
en la fragilidad de plumas de tus huesos,
sí, mírame, papá,
es domingo y será de infancia,
de pronto me recuerdo vegetal,
soy en el claroscuro
de un silencio de flores,
vestida de domingo me miro en tu mirada
(por qué dices que es marzo
si llegas en octubre
como una niebla blanca),
mírame,
me he puesto las enaguas
y he ocultado el llanto
en la fragilidad de plumas de tus huesos,
sí, mírame, papá,
es domingo y será de infancia,
de chopos y de río,
como antes,
cuando tu vigilante terneza me salvaba.
.
cuando tu vigilante terneza me salvaba.
ufff qué belleza
ResponderEliminarun abrazo :)
La añoranza que pervive al tiempo , la palabra que nos une con aquellos a los que amamos, a los que amaremos siempre.
ResponderEliminarUn abrazo mi querida Paloma .
No hay olvido, no, esos momentos no pueden caer en el olvido, absolutamente tierno, evoca y conmueve.
ResponderEliminarBesos infinitos.
Leo
La belleza y la ternura tienen un nombre: Paloma
ResponderEliminarBesos mil
Hay Paloma, que belleza.
ResponderEliminarMe callo y te beso.
Gino
(no puedo comentar desde mi cuenta)
"(por qué dices que es marzo
ResponderEliminarsi llegas en octubre
como una niebla blanca)"
Eso es precioso.
¿Porqué será que, en ocasiones, la nostalgia se viste de infancia?
ResponderEliminarPrecioso poema Paloma.
Muchos besos!!
en estas ocasiones me pregunto para qué narices escribo? si tu ya todo lo llenas de belleza.
ResponderEliminares una preciosidad de versos que llenan de esa "terneza" y me hacen volver a llevar coletas
besicos montones y montones
Qué delicia de poema, Paloma. Un soplo de brisa y de pétalos blancos.
ResponderEliminarMas besos.
No hay olvido, no. Ellos están dentro de nosotros.
ResponderEliminarUn abrazo, Paloma.
Me enterneció tu poema.
Espero que siempre puedas vivir en su mirada
ResponderEliminarUn silencio de flores me convoca a leerte amiga Paloma, un poema precioso de bellos recuerdos que nunca se olvidan, un fuerte abrazo para ti maestra Paloma
ResponderEliminarDe una tierna melancolía estremecedoramente sublime. Precioso.
ResponderEliminarBesos.
"Vestida de domingo me miro en tu mirada".
ResponderEliminarComo siempre, Paloma, tierna y elegante.
Un beso.
Es precioso, no puedo decir más. Felicitarte sería obsceno.
ResponderEliminarPrecioso homenaje, Paloma. Su actual imagen de desamparo y debilidad no tiene que hacernos olvidar la de antes, cuando su manto protector siempre estaba sobre nosotros.
ResponderEliminarEn estos momentos especialmente, me apropio de tu poema.
Un abrazo enorme y mi gratitud por tu llamada.
Me ha emocionado la forma de evocar a tu Padre (un domingo de infancia, de chopos y de río) de este espléndido poema. Igualmente me encantó la entrevista que hiciste a Juana Vázquez a quien no conocía. Gracias, Paloma (también por entrar en mi blog y dejar tu comentario que ha sido un lujo).
ResponderEliminarUn beso
Brillante las manos que trazan unos versos para un padre...No hay olvido posible cuando se trata de un padre.
ResponderEliminarUn abrazo.
Los sentimientos profundos que despiertan los recuerdos, los momentos marcados vividos en la compañía de un padre, son únicos guardados en el corazón.
ResponderEliminarMuy bello Paloma
Besos
Los sentimientos profundos que despiertan los recuerdos, los momentos marcados vividos en la compañía de un padre, son únicos guardados en el corazón.
ResponderEliminarMuy bello Paloma
Besos
Loren Simón
No funciona bien Blogger,pido disculpas
Un poema con color a sepia, con olor a enaguas que crujen agua, jabón y almidón; un poema que metiéndose en la añoranza arrastra al lector hasta esa figura paterna que desconoce el olvido.
ResponderEliminarUn poema como pocos, fortalecidamente tierno.
Un abrazo.
Hermosa pincelada de sentimientos puros!
ResponderEliminarBesos
Ezequiel
Esos días los guardamos
ResponderEliminara buen recaudo,
en ese rinconcito
de la memoria
en donde no cabe el olvido.
Belleza y ternura.
Un beso
es una delicia leer cosas así... gracias
ResponderEliminarbesos
Sigo aqui pero ando muy liada.
ResponderEliminarUn gran abrazo
Esmeralda
Bello, bello, bello, Paloma. Qué imágenes tan buenas para algo tan entrañable. Un beso.
ResponderEliminarUn grito de retorno a la niñez amada de donde se puede ver el corazón de los que amamos tanto. Sublime y maravilloso, gran final. Un abrazo y felicitaciones.
ResponderEliminarReconozco que estoy envejeciendo, pues me he emocionado al leerte.
ResponderEliminarAbrz.
Siempre me deleito con tus versos.. un placer de verdad visitarte..
ResponderEliminarMe disculpo por mi ausencia de tu espacio.
Un abrazo
Saludos fraternos....
Que disfrutes de un ben fin de semana..
Tus versos exhalan nostalgia, ternura y un gran cariño.
ResponderEliminarPrecioso homenaje para cualquier padre, en este caso el tuyo.
Besos
Versos realmente hermosos que despiertan los sentimientos más profundos. No hay olvido posible cuando se trata de un padre; incluso cuando nuestra memoria no alcanza a recordar cuánto tiempo hace de su partida sigue presente en el recuerdo, en un lugar del corazón donde no hay lugar para el olvido.
ResponderEliminarEs un poema con imágenes llenas de ternura y que emocionan tremendamente, y algunos me dejan sin palabras
"me he puesto las enaguas de la adolescencia
y he ocultado el llanto
en la fragilidad de plumas de tus huesos"
Un placer leerte.
Besos
Ana