Foto: nick bartoletti
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A mi padre, el ser más generoso que conozco.
Determinó llevar lo frágil de la vida
como una niebla justa,
se inundó del murmullo nacarado,
del viento inalterable y oceánico,
se equilibró de sal.
Con la sabiduría milenaria
cercenó los recuerdos fatigados,
comprendió la ternura de los árboles
y el misterio que llora el azafrán.
Descubrió el sentido inverso del principio,
comenzó a vivir desde el final.
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Hey, Palomita...
ResponderEliminarQué poemazo, breve, intenso, profundo delicado.... Además con un broche de oro puro.
Feliz día.
¡Qué bello! ¡Absolutamente profundo y mágico!
ResponderEliminarPaloma querida, no importa cuánto tiempo lleve sin pasar por aquí (maldito tiempo), siempre me resulta el mayor de los placeres.
¡FELIZ AÑO 2011!
Un beso enorme :)
Leo tu poema en alto y la música se hace presente en mis oidos. Adoro el ritmo de tus versos Paloma.
ResponderEliminarImposible destacar un solo verso hoy.
Mil gracias amiga por tu poesía.
Un beso de tu amigo Ánima.
Es el más bello y poético signicado de carpe diem que haya leído nunca.
ResponderEliminarUn beso desde el silencio y la admiración.
Descubrió el sentido inverso del principio;
ResponderEliminarcomenzó a vivir desde el final.
Esto estoy descubriendo...y tu lo describes.
un beso desde el pricipio del final...
Andres
Vivir a toda pastilla...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
ay Paloma.... hoy he recordado y me fundí con el aire que me trajo una mirada y esa ternura de los árboles cuando en ayeres se engalanan...
ResponderEliminarBesos dos uno pa ti otro pa tu padre
Bellísimo, Paloma. Un delicioso regalo para tu aita.
ResponderEliminarAbrazo con flores
Descubrió el sentido inverso del principio...Toda una declaración de idem.
ResponderEliminarUn abrazo.
Paloma, me ha encantado, me lo apropio, con tu permiso. Es un final impresionante. Carpe diem. Besos emocionados.
ResponderEliminarHermoso, tanto, como el comprender la ternura de los árboles o aprender a vivir desde el final.
ResponderEliminarEs no darse por vencido, es creer.
Buenas noches y gracias querida Paloma.
Un regalo francamente hermoso para tu padre, me ha encantado y emocionado. Un abrazo muy fuerte.
ResponderEliminarEs la única forma de hacerlo, Nina de Oro:de atrás pa'lante, para que nadie pueda impedir que atrapes el día como una mariposa y lo lleves contigo revoloteando en la red magnífica y cabalística de tu cabello hermoso. Un disección poética de altos registros, Paloma. Un beso grande.
ResponderEliminarDescubro al releer que es para tu padre este poema. Darás a él, entonces, la mariposa del día que vive atrapada en tu cabellera de lumbres.
ResponderEliminarEsto es lo que yo llamo entender la vida y disfrutarla plenamente.
ResponderEliminarPrecioso poema, Paloma. Gracias por compartirlo.
Besos
Para recomenzar con tal espíritu solo hay que pararse un poco y sentir, eso que no hacemos nunca por falta de tiempo. Claro que... también puedes venir aquí y ocurrirá.
ResponderEliminarUn placer volver a disfrutar de tus poemas.
Un abrazo y feliz año.
Paloma, que seu novo ano seja de grandes inspirações, para nos alegrar com suas encantadoras poesias.
ResponderEliminarObrigado pelo carinho.
Bj meu
Brillante final, Paloma, que no desmerece para nada el resto del poema, perfectamente trazado en imágenes y versos. En tu linea.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Lindo, lindo.
ResponderEliminarTe dejo acá una entrada mía titulada también "Carpe Diem". Creo que te gustará.
http://elmundodemarisol.blogspot.com/2011/01/carpe-diem.html
Recibe muchos saludos desde Berlín.
Se me queda la piel erizada leyéndolo de principio a fin y viceversa, y no una, dos o mil veces, me sucederá al infinito, porque este poema tuyo es de esos que trascienden.
ResponderEliminarUn abrazo que sea capaz de acerar las distancias.
Leo
A veces, como hoy, me dejas sin palabras.
ResponderEliminarEs bellísimo.
Un abrazo en el corazón.
Disfrutar de todo descubriendose desde lo complejo a lo menos complicado
ResponderEliminarHola Paloma ¡Tanto tiempo! Cómo siempre exquisito, el último verso magistral.
ResponderEliminarFeliz 2011.
Que Calíope te siga acompañando.
"el misterio que llora el azafrán"
ResponderEliminarmuy bonita imagen, Paloma, y qué bien suena en tí ese vocablo azafrán, su rotunda sonoridad, su aguda percusión, que pide a su lado un alado alazán para elevarse un poco como un flan. Saludos bloggeros
Fantástico Paloma, realmente fantástico tu poema, me ha encantado. En mi opinión este poema tuyo es el mejor de todos cuantos te he leído. De verdad te lo digo, fantástico. Un abrazo y mi mas sincera enhorabuena
ResponderEliminarPues sencillamente que me ha emocionado y mucho; es hermoso y me quedo corta al decirlo...y repito muchas veces los versos del final.
ResponderEliminarUn abrazo muy grande-grande
Unos preciosos versos con una gran lección de vida, esa vida que se resiste a ser mero acontecer para volverse palpitante siempre y, como los niños, estar atenta a todo.
ResponderEliminarCada día la vida trae sus misterios y sus regalos. Conviene mirar con los ojos limpios para apreciar los dones que sobre nosotros derrama.
Bellísimo homenaje a ese ser querido.
Un beso y carpe diem, Paloma.
Desde la primera lectura, hace unos días, se me clavó ese misterio del azafrán ;-) pero no me había dado cuenta de la dedicatoria, a tu padre. Hoy, al volver a leerte, sí. ¡Toda una lección, Paloma, este poema a ese padre, generoso. Una lección para que algún día también aprendamos a "cercenar los recuerdos fatigados" y vivir, como él, desde el final. ¿Lo intentamos ;-)? Entretanto, un beso, inmenso, Paloma.
ResponderEliminarMe has emcionado. Te leo mientras escucho a mi añorado Enrique Morente. Tu poema tiene versos para recordar toda la Vida. Gracias.
ResponderEliminarHay intensidad en la brevedad del poema. Leyendo la dedicatoria, se entiende.
ResponderEliminarEl 'sentido inverso del pirncipio' y ese 'se equilibró de sal' imprimen lo especial, lo único a la semblanza.
Es maravilloso que alguien haya descifrado 'el misterio que llora el azafrán'. Es una imagen sugerente y abierta.
Un placer, Paloma,
Laura
Paloma mía:
ResponderEliminarBellísimo poema, una descarga de profundidad sacudiendo el corazón, ¡cuánto amor a tu padre! El mejor que has escrito, y creo que esto ya qte lo he dicho alguna vez; cada día te sueperas a ti misma y eres más verdad, auténtica poesía.
Te quiero y estoy contigo.
Elvira
Y de un salto premeditado comenzó a vivir desde el final. ¡Qué cierto!
ResponderEliminarAbrazos
Más allá de la belleza del poema, más allá de la perfecta textura de sus versos e imágenes, me quedo con la emoción. Y con ese "carpe diem" que a veces olvidamos.
ResponderEliminarBs
Que maravilla, querida amiga, aprecio singularmente este poema porque reviva el amor por mi propio padre.
ResponderEliminarEnhorabuena por tan bien logrados y sentidos versos.
Un abrazo afectuoso, Paloma.
.empezar a Volver
ResponderEliminarabrazo
Un bellísimo poema, que trasluce mucho amor.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Paloma
Rotundo texto
ResponderEliminar"Descubrió el sentido inverso del principio;
comenzó a vivir desde el final."
me ha gustado ese final, impecable